- ¿Le agrada a usted haberme conocido, Mr. Gray? -Dijo Lord Henry, mirándolo.
- Sí; me agrada ahora. Y me pregunto si me agradará siempre
- Siempre! Es una palabra terrible. Me hace estremecer cuando la oigo. Las mujeres son muy afines a usarla. Estropean toda la novela, queriendo hacerla eterna. Es una palabra sin ningún significado. La única diferencia que hay entre un capricho y una pasión eterna es que el capricho dura un poco más de tiempo.
Boníssima novel·la. Bon any
ResponderEliminarNo l'he llegida! Una abraçada.
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