martes, 24 de mayo de 2011

Casa Asia Film Week

Nos despedimos con buen sabor de boca del D'A, pasando por un festival de Quebec con muy poco interés y damos la bienvenida al "Casa Asia Film Week", del 6 hasta el 12 de junio. Repasada la programación podemos destacar, por encima de lo puramente comercial, a Jia Zhang Ke con "I wish I Knew" i a Brillante Mendoza con "Kinatay". Ambos un poco en baja forma pero aún así os recomiendo las dos; la primera siendo un documental al más puro estilo Wang Bing en "He Fengming" y la segunda la recomiendo a ciegas, pues aún está por ver.
Por mi parte las que despiertan en mí más interés y seguramente van a caer son:

A better tomorrow (Song Hae-sung): El drama-romance coreano de toda la vida pero con cierto toque que lo distancia de demás directores y es que y al menos en sus trabajos anteriores, centra el romance en lo incómodo, lo moralmente prohibido o lo imposible.
Haru's journey (Masahiro Kobayashi): Sin haber visto nada del director, el único reclamo para ésta es que el protagonista sea ni más ni menos Tatsuya Nakadai, el más grande del cine nipón clásico junto a Toshiro Mifune

Man From Nowhere (Lee Jeong-beom): Ésta a recomendación de un amigo, desconozco la pelicula pero me fio de su criterio.

The Stool Pigeon (Dante Lam): Puro thriller de hong-kong, entretenimiento asegurado sin tener que ir a buscar más allá

Don't go breaking my heart (Johnnie To): Johnnie To es especialista en thrillers y cine yakuza, aunque esta vez nos presente esta obra en forma de comedia romántica. La verdad es que hecha un poco para atrás, pero se le puede dar una oportunidad.

de momento hasta ahí es todo, dejo enlace de la programación para los interesados:

http://www.casaasia.es/documentos/cafw_programa.pdf

lunes, 16 de mayo de 2011

D'A 2011

La verdad es que este festival ha estado muy bien. Buena organización, buena compañia, kebabs con prisas y, por supuesto, buenas peliculas. Así que nos despedimos con pena del BAFF, que nos ha brindado durante muchos años de lo mejor del cine asiatico, y damos la bienvenida al cine de autor, con la esperanza que dure muchos años. Ahi va una pequeña reseña de lo que se vio:

Oki's Movie: último trabajo del coreano HHH, que sigue su línea tanto en forma como en contenido. En cierta manera siempre hace la misma película pero qué importa si lo hace brillantemente. Tal como comentó Albert Serra, la jerarquía entre personajes y entre sexos es vital para poder entender a nuestros protagonistas.

Cold Fish: Ahora vamos con Sion Sono, pasamos al género gore con pinceladas cómicas mezclado con ciertos toques de "pinku" japones. Sono cada vez va más al "extremo" perdiendo su inicial originalidad para dar paso a ese morbo de la violencia y el sexo, lo que deja un poco en descubierto las limitaciones del director. De todas formas es una película más que entretenida, pero sin llegar al nivel de Noriko Dinner's Table, Suicide Club y hasta Love Exposure

Le père de mes enfants: Creo que lo más destacado de este film fue oir a la directora presentando a la película. Cierto que pretende darle ese toque de Autor pero creo que en su propia intencionalidad se ve un poco forzada. El argumento tampoco acaba de abarcarlo bien, y si saber muy bien como redondearla, añade otros temas que poco aportan a la historia principal.

The Saddest music in the world: Sin duda la gran sorpresa del festival. Guy Maddin es un director único en su forma y por sobre de todo muy atrevido, ofreciendonos un cine que practicamente tiene salida nula para el público contemporaneo. Lo más normal si dices que vas a ver una peli canadiense en blanco y negro y con una estética propia del cine expresionista alemán de los años 20 es que te ganes el título de freak de por vida, así que lo mejor es no decir nada. Además Maddin tiene una originalidad en sus películas que da gusto, parece que no haya perdido esa imaginación que tenemos todos cuando apenas llegamos a los 10 años.

El extraño caso de Angélica: Y para finalizar la guinda del pastel. No dudaria ni un momento en poner a Oliveira entre los 5 mejores directores de la actualidad. Creo que es mejor no decir nada de ésta y que la descubrais viendola. La mejor señal fue que la gente abandonaba la sala antes de terminar un film, y no hay mejor reclamo para saber que vas a ver una obra maestra.

Como apunte final añadir que la mejor pelicula del festival fue (lógicamente) para Meek's Cutoff que, sin haberla visto, puedo garantizar que es de obligada visión, pues todo lo que he visto de Kelly Reichardt es FANTASTICO.

domingo, 8 de mayo de 2011

El curioso caso de Angélica

Manoel de Oliveira, pese a sus 102 años, tiene la cabeza bien lúcida y no hay mejor prueba que ver su último trabajo, El curioso caso de Angélica. Por encima de todo es una historia de amor imposible, a modo de cuento de hadas, pero tal y como nos introdujeron hay mucho más para ir rascando y encontrando detalles que van perfilando la mente del director.

Llegados a este punto hago un pequeño inciso para citar a Goddard, cuya percepción del cine es tal que "La fotografía es verdad y el cine es verdad 24 veces por segundo". Esto es vital para entender a nuestro protagonista. Él es fotografo y descubre, a partir de una sessión de fotos, una realidad (verdad) antes imposible para él. A partir de este punto la realidad tal y como siempre la había percibido deja de ser tal, para dar paso a su otra realidad, representada en sueños y fantasias encerradas en el marco de una foto, donde aparece el amor idílico.

Hay un paralelismo que nos invita a pensar que la realidad en la que acaba creyendo nuestro héroe es la auténtica, mientras que su entorno vive en una falsa realidad, y esto convierte la película en algo totalmente mágico. Se trata en la obsesión que tiene en fotografiar a los campesinos trabajando la tierra con el esfuerzo de sus propias manos. Esto la casera no lo entiende, dice que "ahora este trabajo a pasado a manos de las máquinas, que no tiene sentido fotografiar algo que ya está dejando de ser el presente". Él replica que es justamente ese valor tradicional lo que quiere y, en el fondo, encontrar esa realidad en las fotos, sentir en tales el esfuerzo humano y la melodia de sus herramientas trabajando la tierra. Él sueña con esta "melodia" hasta que despierta oyendo el ruido de las maquinas, que acabarán sustituyendo irremisiblemente esa tradición. Todo esto lo vemos exactamente con su amor imposible con Angelica; ve esa realidad en la foto hasta llegar a enamorarse de ella, sueña con ella mientras siente que esta realmente vivo, hasta que despierta y vuelve a habitual realidad que cada vez lo es menos, hasta que deja de serlo completamente.

Para acabar, a tener en cuenta el fantástico aunque poco esperanzador final. En él aparece la habitación de nuestro protagonista, que ya ha escogido el camino sin retorno de la realidad de Angelica, mientras que el resto quedan conmocionados, incapaces de desenmarañar el viaje que ha hecho hacia la verdad. Entonces vuelve a oirse, a través del balcón, esa melodia de los campesinos arando la tierra, ese grito de esperanza hacia la auténtica realidad del factor humano. Impasible, la casera cierra los ventanales para no oír esa música, quedando su mente cerrada y la habitación en completa oscuridad.