
Íbamos a menudo al cine.
Nos estremecíamos al
ver la pantalla.
Pero la mayoría de las veces
al final nos decepcionaba.
Las imágenes iban y venían
y Marilyn había envejecido.
Estábamos tristes. No era
la película que soñábamos.
Spike Jonze, siguiendo su fiel estilo entre lo hipnótico y el videoclip, hace que volvamos a creer en el cine con I'm Here, aunque sea por solo 30 minutos. Con "Donde viven los monstruos" volvimos a ser niños durante 1 hora y media, ahora con este regalo en forma de mediometraje volvemos a creer en el amor bajo una estética futurista y robotizada, pero a su vez más humana que nunca.